Fuente: Nutrinews
www.nutricionanimal.info
Fecha: 5 de Junio de 2021
El estudio que se presenta evalúa los efectos beneficiosos del microgranulado sobre el rendimiento productivo en pollitos con bajo peso vivo al nacer.
INTRODUCCIÓN
Una alimentación temprana (primeras 48-72h) de los pollitos resulta en una mejora de la productividad, acelera el desarrollo del tracto gastrointestinal y contribuye positivamente al desarrollo del sistema inmune (Sklan, 2003).
→ El período inmediato tras el nacimiento es crucial y debe asegurarse una pronta ingesta de pienso facilitando su acceso, disponibilidad y prehensión para viabilizar la producción.
Algunos trabajos han sugerido que una forma de presentación del pienso en pellet conlleva beneficios como un mayor crecimiento en edades tempranas y un aumento de la productividad, posteriormente (Cerrate et al., 2008; 2009; Michard and Rouxel, 2014).
Dicha mejora es argumentada bajo la hipótesis que las aves seleccionan un tamaño adecuado del alimento según su capacidad de la cavidad oral y que les permita la optimización de energía al consumir, circunstancias que favorecen la ingesta de pienso con mayor eficiencia.
El peso vivo al nacimiento, determinado por la edad de las gallinas reproductoras entre otros factores, influye en el desempeño productivo y la mortalidad de los pollitos (Viera y Moran, 1999), especialmente durante la primera semana de vida.
Este hecho parece estar asociado a una menor movilización de lípidos del vitelo del huevo (yema) debido a su menor tamaño. Por lo tanto, la capacidad de supervivencia y el potencial productivo de un pollito está determinado en parte por el peso vivo al nacer.
El presente trabajo planteó la forma de presentación del pienso de pre-iniciación en microgranulado como una estrategia para incrementar la vitalidad y rendimiento productivo en pollitos con un bajo peso vivo al nacer a corto y medio plazo de la crianza.
OBJETIVO
Evaluar el efecto de la forma de presentación del pienso de primera edad (migajas vs. microgranulado) y el peso vivo al nacimiento (36,2 vs. 39,9 g) sobre los resultados productivos y de mortalidad en pollos de engorde.
MATERIALES Y MÉTODOS
» Animales:
3.087 pollitos Ross mixtos de 1 día de edad y 0,038 ± 0,0020 kg de peso vivo inicial.
» Material de cama: viruta de madera (4 kg/m 2 ).
» Diseño experimental: 2 x 2 factorial.
〉 Forma de presentación del pienso de primera edad:
migajas vs. microgranulado
〉 Peso vivo al nacer:
bajo peso vs. medio peso (36,2 y 39,9 g), de pollitos procedentes de reproductoras de edad joven e intermedia (26 y 38 semanas de puesta, respectivamente).
» Duración de los tratamientos:
Los primeros 7 días de un total de 37 días de engorde.
〉 Los pollitos se distribuyeron aleatoriamente en 24 corrales (superficie de 10,1 m 2 ) de 129 animales por corral (6 corrales por tratamiento).
〉 Principalmente, la ración estaba compuesta según la fase de crianza a base de maíz, soja, trigo, sorgo y girasol (pre-iniciación, 0 a 7 días; iniciación, 8 a 22 días; crecimiento, 23 a 30 días; y acabado, 31 a 37 días).
» Medidas por corral:
⇒ Peso vivo y consumo de pienso a los 0, 7, 22, 30 y 37 días de estudio coincidiendo con cada fase del programa de alimentación.
⇒ Mortalidad a diario.
⇒ Calidad física del pienso de primera fase (granulometría, dureza, diámetro y longitud).
ANÁLISIS ESTADÍSTICO
Los datos productivos y de calidad del pienso fueron analizados mediante un modelo de efectos mixtos con medidas repetidas.
RESULTADOS
Tras los primeros 7 días de estudio e independientemente del peso vivo al nacer de los pollitos, el microgranulado registró (P < 0,10) en comparación con las migajas:
⇒ Mayor peso vivo
0,1673 vs. 0,1389 ± 0,01113 kg
⇒ Incremento en consumo de pienso
0,1567 vs. 0,1355 ± 0,00210 kg/pollito
⇒ Mejora en crecimiento
0,1293 vs. 0,1008 ± 0,00685 kg/pollito
⇒ Mejor conversión alimentaria
1,2150 vs. 1,3459 ± 0,01792 kg/kg
Se observó una interacción (P = 0,08) entre la forma de presentación del pienso y el peso vivo (PV) al nacer en el consumo de pienso diario durante los primeros 7 días de estudio (Figura 1).
En el global del estudio, el desempeño ventajoso del microgranulado se evidenció (P < 0,01) en relación con las migajas, con los siguientes resultados:
⇒ Mayor peso vivo final
2,0758 vs. 2,0416 ± 0,01837 kg
⇒ Mejora del índice de conversión
1,5922 vs. 1,6113 ± 0,00835 kg/kg
El microgranulado incrementó el consumo de pienso en los pollitos con bajo peso vivo al nacer al finalizar la primera semana de estudio (0,03674 vs. 0,02867 ± 0,00041 kg/día).
→ El peso vivo al nacimiento tuvo un efecto (P < 0,10) generalizado en los resultados productivos a lo largo de los 37 días de estudio.
Los pollos con un peso vivo inicial medio en comparación con los de bajo peso vivo inicial registraron:
⇒ Mayor peso vivo final (2,1032 vs. 2,0142 ± 0,01837 kg)
⇒ Superior ganancia media diaria (0,0558 vs. 0,0535 ± 0,00049 kg/día)
⇒ Incremento en el consumo de pienso diario (0,0885 vs. 0,0864 ± 0,00074 kg/día)
⇒ Menor conversión alimentaria (1,5865 vs. 1,6169 ± 0,00835 kg/kg)
No hubo diferencias en mortalidad a causa de la forma de presentación del pienso y/o el peso vivo al nacimiento (1,7775 ± 0,26480%).
Un análisis de la granulometría del pienso de estudio constató que el microgranulado tenía:
Tamaño de partícula = Un 89% de las partículas con un tamaño ≥ 2,5 mm frente a las migajas que registraron un 93% de partículas con un tamaño ≤ 1 mm.
Diámetro = 2,58 mm
Longitud = 6,38 mm
Dureza = 6,94 kg/cm2
CONCLUSIONES
Este estudio evidenció que la forma de presentación del pienso en microgranulado mejoró los resultados productivos a corto (los primeros 7 días) y medio plazo (37 días de engorde) con un mayor peso vivo final (1,7%) y eficiencia alimentaria (1,2%).
También, como era esperable, se constató que el peso vivo al nacimiento, influido por la edad de las reproductoras, tuvo un claro efecto en la productividad, observándose mejores resultados en los pollos con mayor peso vivo inicial.
Finalmente, se observó una interacción entre la forma de presentación del pienso y el peso vivo al nacer durante la primera semana de estudio, donde el microgranulado fue capaz de aumentar el consumo de pienso (32,7%) en pollitos con menor peso vivo inicial, aunque dicha interacción no tuvo efectos al finalizar el engorde.
Así pues, el microgranulado parece ser una muy buena opción de forma de presentación del pienso a primera edad para incrementar el consumo de pienso y el crecimiento de los pollitos y, consecuentemente, mejorar la productividad global en el engorde de pollos.