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Fuente: NUTRINIEWS

www.nutricionanimal.info

Fecha: 24 de Agosto de 2022

ALTERNATIVAS AL ÓXIDO DE ZINC EN EL DESTETE

A partir de junio de 2022, la Unión Europea ha retirado el óxido de zinc como promotor de crecimiento y para la prevención de las diarreas por destete.  Así pues, el sector porcino se ve en la necesidad de implementar alternativas para mantener la competitividad. Los ácidos orgánicos y los aceites esenciales son la opción más accesible y efectiva para los porcicultores de Europa.

LA DIARREA POR DESTETE

Muchas de las diarreas del lechón aparecen durante momentos de cambios importantes en su vida.

 Los cambios fisiológicos, el estrés y diversos factores ambientales conspiran para propiciar la enfermedad.

Por ejemplo, un encalostramiento deficiente conduce a diarreas multicausales, pues el lechón no cuenta con la inmunidad pasiva necesaria para defenderse de los patógenos que circulan en el ambiente. Contrariamente, una carga de patógenos demasiado elevada es capaz de superar cualquier defensa.

 El destete es uno de los momentos de mayor estrés para los cerdos jóvenes, ya que deben adaptarse a una nueva dieta, ambiente y estructura social.

Estos cambios pueden afectar a las defensas del cerdo por sí mismos, no obstante, el principal motivo de las diarreas por destete se debe a que el tracto digestivo del cerdo joven aún no ha alcanzado la madurez y la capacidad para secretar ácido clorhídrico es reducida.

 Consecuentemente, el estómago de cerdos recién destetados no alcanza la acidez óptima (pH de 2 a 3.5) para la actividad de las enzimas proteolíticas.

La incapacidad de digerir el alimento implica menor absorción y aprovechamiento de nutrientes y, en última instancia, un menor crecimiento. Además, el pH elevado, así como la presencia de un sustrato indigesto, propicia la proliferación de bacterias patógenas, en especial enterobacterias como Escherichia coli y Salmonella spp.

 Al presentarse estas condiciones, sobrevienen las diarreas por destete. Más aún, un pH entre 4 y 5 es propicio para bacterias clostridiales, productoras de potentes exotoxinas que resultan mortales para los cerdos.

Previo al destete, el problema de la subida del pH no es tan pronunciado, a pesar de una mayor inmadurez del tracto gastrointestinal. Esto se debe a que la leche es altamente digestible para el lechón y, además, es el sustrato óptimo para bacterias acidófilas benéficas como Lactobacillus spp., las cuales prosperan en un pH entre 2 y 3 y también contribuyen a la acidificación general del tracto gastrointestinal.

No obstante, durante el destete, la microbiota sufre en dos frentes:

 Pierde su sustrato predilecto (la leche) y,

 La subida del pH no la favorece. Las bacterias acidófilas son parte de una microbiota sana y cumplen la función —entre muchas otras— de mantener a raya las poblaciones de bacterias patógenas, en especial E. coli.

Finalmente, otro factor que contribuye a las diarreas por destete es el alimento mismo, el cual puede estar contaminado con bacterias, hongos o mohos.

En cierta forma, podemos entender las diarreas por destete como una crisis ecológica en el intestino de los cerdos jóvenes.

 La diarrea es tan solo la manifestación de un desequilibrio mucho más profundo.

Durante el destete, los cerdos jóvenes se separan de su madre y se alojan en instalaciones diferentes y en grupos más numerosos, lo cual es fuente de estrés.

El cambio de alimentación durante el destete ocurre cuando el sistema digestivo de los cerdos jóvenes aún está inmaduro.

EL PAPEL DEL ÓXIDO DE ZINC

Durante décadas, el sector porcino ha buscado aminorar las mermas causadas por las diarreas por destete.

 El óxido de zinc como aditivo, así como el uso profiláctico de antibióticos, han sido utilizados como promotores del crecimiento.

El óxido de zinc tiene un efecto bacteriostático y bactericida cuyo mecanismo de acción aún no se ha dilucidado por completo. No obstante, gracias a su relativa seguridad y a su bajo coste, su adopción como aditivo para evitar las diarreas por destete ha sido casi universal.

Sin embargo, a partir de junio de 2022, el uso terapéutico del óxido de zinc ha quedado prohibido en todo el territorio europeo.

A su vez, la dirección que ha tomado el sector ganadero en lo referente al uso de antibióticos profilácticos, al menos en Europa, tiende hacia la prohibición de su uso.

 De hecho, el óxido de zinc se consideró durante varios años como una alternativa a los antibióticos. Así pues, ahora que ambas opciones se retiran como promotores del crecimiento, los porcicultores deben encontrar alternativas para seguir siendo competitivos.

¿POR QUÉ SE RETIRÓ EL ÓXIDO DE ZINC COMO ADITIVO PROMOTOR DEL CRECIMIENTO?

El óxido de zinc tiene dos usos en porcicultura.

 En bajas dosis, como aditivo nutricional, y

 Uso terapéutico (en altas dosis), que tiene un efecto contra las bacterias y se usa para prevenir las diarreas por destete.

No obstante, la capacidad de retención de zinc es baja y no aumenta con la dosis. Esto quiere decir que casi todo el zinc que ingieren los cerdos termina en sus heces y, consecuentemente, en el medio ambiente, contaminando suelos y acuíferos.

El exceso de nutrientes en la naturaleza puede crear severos desequilibrios ecológicos, un fenómeno llamado eutrofismo, por el cual una especie (usualmente un alga o una bacteria) aprovecha el nutriente en cuestión y prolifera desaforadamente, dañando gravemente al ecosistema.

 El sector porcino ya tiene experiencia con el eutrofismo, en particular con el fósforo.

¿QUÉ ALTERNATIVAS EXISTEN AL ÓXIDO DE ZINC?

El óxido de zinc era una solución muy conveniente, así que resulta difícil encontrar un único sustituto. Es probable que los porcicultores europeos tengan que recurrir a diferentes estrategias.

MEJORAS EN EL MANEJO PRE Y POSDESTETE

El óxido de zinc o los antibióticos profilácticos realmente no son promotores del crecimiento, sino que evitan las pérdidas que causan las diarreas causadas por desequilibrios en el tracto gastrointestinal. Así pues, en teoría, evitando este desequilibrio, se puede reducir el efecto de las diarreas.

 La mejor manera de hacerlo es fomentando un encalostramiento riguroso.

Este comienza con la vacunación de la cerda y su correcta alimentación, según su estado fisiológico, y con la aplicación de técnicas de homogenización de camadas (cross-fostering, en inglés).

La bioseguridad y la limpieza reducen significativamente la carga de patógenos. La reducción del estrés también juega un papel importante en la inmunocompetencia de los cerdos, debido a su efecto inmunosupresor.

DIETAS DE TRANSICIÓN MEJOR FORMULADAS

Una reducción temporal en la proteína cruda de la dieta permite al sistema digestivo de los cerdos jóvenes madurar, a la vez que se evita el efecto búfer de los alimentos (es decir, que neutraliza el pH del estómago).

 Asimismo, una dieta más rica en fibra favorece una microbiota más sana.

ACIDIFICACIÓN DE AGUA Y ALIMENTO

Una de las opciones más simples es la acidificación tanto del agua como del alimento con ácidos orgánicos.

El principio de esta estrategia consiste en ofrecer a los cerdos dietas más ácidas, de modo que se pueda evitar una subida de pH digestivo y no se creen las condiciones favorables para las enterobacterias.

Trata de una estrategia sencilla y que puede usarse sistemáticamente, y que además ayuda a mantener los conductos de agua y alimento más higienizados.

ÁCIDOS ORGÁNICOS Y ACEITES ESENCIALES COMO ADITIVOS

Los ácidos orgánicos son la opción más accesible y efectiva para sustituir el óxido de zinc.

Su eficacia para prevenir las diarreas por destete es conocida desde hace décadas y, además, estos ácidos se usan como conservantes de alimentos gracias a su actividad bactericida y fungicida.

Actualmente juegan un papel crucial en la alimentación animal, su uso está ampliamente extendido además tienen un respaldo legal cada vez más importante, ya que cada vez existen más ácidos registrados como reguladores de la flora intestinal, y no solo como conservantes. Además, son una opción de bajo coste.

En cuanto a manipulación, debe tenerse en cuenta que los ácidos tienen cierta peligrosidad, dependiendo del tipo y la concentración, por tanto debe tenerse más cuidado en su uso. Aún así, el uso de sales de los ácidos orgánicos está muy extendido, permitiendo obtener formulaciones con un alto contenido en ácidos pero sin el inconveniente de la manipulación.

Con los ácidos orgánicos podemos empezar a hablar de verdaderos promotores del crecimiento, pues no solo evitan las diarreas por destete, sino que tienen un efecto positivo sobre la morfología del intestino y el metabolismo de la masa muscular.

Los aceites esenciales poseen virtudes incluso superiores a las de los ácidos orgánicos, por esta razón su dosificación suele ser más baja.

Hay gran variedad de aceites esenciales (y también extractos naturales), los cuales tienen multitud de efectos beneficiosos, entre ellos, poder antiinflamatorio, antibacteriano y antifúngico, antioxidante, apetente, etc. Consecuentemente, muchos de sus usos están enfocados al incremento de la ganancia diaria de peso, la conversión alimenticia, la inmunidad y la regulación de la microbiota, y en general a mantener una buena salud de los animales.