Fuente: AVICULTURA
Fecha: Julio de 2021
Una de las mayores zoonosis por carne de pollo podría reducirse sustancialmente con la cría de aves con genes resistentes a Campylobacter.
El Campylobacter es uno de los mayores causantes de zoonosis por consumo de carne de ave en la UE
Una investigación del conocido centro de excelencia avícola Roslin Institute de Edimburgo ha identificado genes en pollos que podrían ofrecer resistencia a bacterias dañinas que se encuentran comúnmente en las aves de corral y podrían proporcionar estrategias para limitar el riesgo de intoxicación alimentaria por campilobacteriosis en las personas.
El estudio, dirigido por un equipo del instituto Roslin, ha identificado un gran número de genes en los intestinos de los pollos que pueden determinar si las aves son resistentes a Campylobacter.
El conocimiento de estos genes resistentes podrían conducir las líneas de investigación hacia la selección y cría de pollos que tienen menos probabilidades de portar la bacteria Campylobacter, y así limitar el riesgo para los consumidores de aves de corral.
Los científicos probaron los efectos de la infección por Campylobacter en pollos criados para ser resistentes o susceptibles a las bacterias. El análisis del tejido intestinal mostró diferencias en la actividad de un gran número de genes, incluidos algunos implicados en la inmunidad, como el llamado Complejo Mayor de Histocompatibilidad y los péptidos antimicrobianos.
La variación entre estos genes en pollos susceptibles y resistentes puede explicar en parte su respuesta a Campylobacter. Estos hallazgos, publicados en BMC Genomics, refuerzan investigaciones anteriores del mismo equipo.
Un estudio anterior, publicado en Applied and Environmental Microbiology, había investigado el papel de los microorganismos en el intestino del pollo en la susceptibilidad a la infección.
El equipo descubrió que el trasplante de microbios intestinales de pollos resistentes a Campylobacter a pollos susceptibles no permitió la resistencia a la infección.
Otro estudio, publicado en Scientific Reports, identificó regiones en la composición genética de los pollos que están vinculadas a la resistencia a Campylobacter. Los científicos buscaron variaciones en posiciones específicas en el genoma de los pollos y los números correspondientes de Campylobacter en el intestino de las aves. Combinaron esto con análisis de la expresión de genes en pollos que eran resistentes o susceptibles a la colonización por las bacterias.
Los resultados les permitieron saber el grado de vinculación de las diferentes partes del código genético de los pollos con la prevalencia de Campylobacter en el intestino de las aves.
Los últimos hallazgos también validan el resultado de otro estudio, también publicado en BMC Genomics, que analizó el código genético de los pollos para identificar áreas vinculadas a la susceptibilidad o resistencia de las aves a Campylobacter. Los genes destacados en este estudio incluyeron el Complejo Mayor de Histocompatibilidad.
“El Campylobacter está presente en más de la mitad de los pollos vendidos, lo que representa un riesgo significativo para los consumidores, y la cría de aves de corral resistentes a las bacterias es una forma potencial de abordar este enorme problema de salud pública», dijo el profesor Mark Stevens del Instituto Roslin.
«Nuestra investigación está arrojando luz sobre cómo la composición genética de los pollos influye en su respuesta a la bacteria, lo que podría ayudar a la selección genética de aves de corral resistentes a Campylobacter y, por lo tanto, mejorar la seguridad alimentaria».